Clavo a clavito

En retrospección al tema de tener que cerrar ese libro que solamente nos produce inconformidad es manteniendo el equilibro emocional y recordando decir “clavo a clavito.” Pues como va el dicho, un clavo saca otro clavo y en muchas ocasiones es lo que muchos buscamos para sentir que aún somos deseados. Es como si nuestra ex-pareja nos había enterrado el clavo del enamoramiento y al irse solamente queda un clavo oxidado que empieza a producir esa indeseable, amargosa sensación…la depresión. Y claro, acompañado con la melancolía y la soledad.


El rompimiento de una relación como muchos han pasado, es un acto que se siente realmente como el peor dolor. Que interesante que este acto es un dolor emocional, no un dolor “verdadero” o físico, y puede causar tanto sufrimiento.

Y aunque se sienta que no encontraras a alguien que te vuelva amar, ¡joder!, que tonterías y lo sabes. Hay miles de personas con quien podrás volver a tener esa misma conexión pero mucho mejor siendo de que ahora podrás empezar fresco y sin resentimientos.

Eso si, para poder sobrepasar un rompimiento saludablemente, hay varios procedimientos para lograrlo.

Punto número uno, ¡de lo que te liberaste! El hecho de haber terminado la relación significa que hay progresión en sus vidas. No importa la razón por cual se terminó, la cosa es que se han dado cuenta que realmente no estaba funcionando lo que al principio parecía satisfacerles.

Punto número dos, acepta lo que ha sucedido como el efecto de la causa. Toma responsabilidad. Muchas veces lo que sucede es de que tomamos el papel de victima y queremos culpar a nuestra ex-pareja de todo. Pero si la relación consiste de los dos entonces los dos son igual de responsables de lo que sucedió dentro de ella. Tomando responsabilidad es esencial para que progreses como pareja.

Y si te has dado cuenta que el susodicho solamente hecho demasiado rollo que al final resulta que te habías enamorado solamente de sus mentiras, entonces, nuevamente… ¡de lo que te liberaste!

Darle cavidad a alguien o algo que no merece ni atención solamente introducirá negatividad y drama innecesaria en nuestras vidas. Que se vayan al demonio porque desde el momento que decidimos que no formaran parte de nuestras vidas fue cuando iban a dejar de tener importancia.

A veces sentimos que ya hemos superado algo pero cuando se menciona nuestro "olvidado" pasado, aún sentimos ese dolorcito en el corazón como si se tratara de algo del día de ayer. Esto es una señal de que todavía nos falta por superar una vieja herida que por orgullo y dignidad derrotamos gotas de esfuerzo para que nuestros ojos se mantuvieran secos. No dejemos que el orgullo nos impida nuestro bienestar.

Exprésense, compartan y sanen. La vida es ahorita y pa’ gozarla.

Y si se te apetece el nuevo galán o dama que se te presenta días después del rompimiento, recuerda que puede ser un espejismo inconsciente que se produce como el antídoto natural para curar la soledad y melancolía.

Pero igual si sientes que eso te ayuda en superarte, pues adelante. Solamente no te ciegues y sigas dando vueltas en el ciclo vicioso de las malas relaciones. Nunca sabes, puede ser que el siguiente clavito le de en el mero clavo. Que empiece el coqueteo y recuerda: Clavo a clavito.